El noroeste inexplorado de Irlanda en 48 horas

Alquila un coche y dirígete directamente al parque nacional y el castillo de Glenveagh, cerca de la montaña de Derryveagh. Es un lugar impresionante con 16.187 hectáreas de glens, montañas, bosques e incluso una manada de ciervos. Consigue billetes para el autobús que te llevará desde el centro de visitantes al castillo, donde puedes empaparte del glamour. Los jardines están abiertos todo el año y la entrada es gratuita. Son famosos por su variada colección de árboles, arbustos y flores, que están plantados entre los jardines de recreo del siglo XIX, el jardín amurallado, el invernadero gótico de naranjos de estilo más moderno, el patio italiano y el jardín toscano. Antes de partir, degusta los deliciosos bollos, pasteles, panes, sopas y sándwiches de Glenveagh Castle Tearooms.

Rodeado de más de 16 hectáreas de bosque y jardines, el castillo de Lough Eske ofrece una maravillosa mezcla de lo antiguo y lo nuevo entre el cristalino Lough Eske y las montañas de Blue Stack. Este lujoso hotel de 5 estrellas, que data del siglo XV, aprecia su historia pero se adapta a lo moderno. Prueba los elegantes platos contemporáneos del restaurante Cedars Grill y entenderás lo que decimos. Acaba la velada en el Oak Bar con una sesión de música tradicional.

Si dispones de más tiempo, visita Donegal, donde podrás relajarte mientras exploras su encantador puerto, la abadía de Donegal del siglo XV y el castillo de Donegal recientemente restaurado. Y no pierdas la oportunidad de conseguir un recuerdo artesanal único en el Donegal Craft Village.

Si algo no le falta a Derry~Londonderry es historia. Durante 400 años, sus históricas murallas han dividido la ciudad. Con una longitud de 1,6 km y un grosor de 10 metros en algunos lugares, recorrerlas a pie es una forma estupenda de ver la ciudad desde todas las perspectivas y admirar sus 24 cañones negros descomunales. Los apasionados guías de la ruta Unlocking the Walled City combinan el humor y la historia en perfecta armonía para contarlo todo sobre la ciudad, desde su fundación en el siglo VI hasta nuestros días.

La historia de Derry~Londonderry abarca cuatro siglos de batallas, relatadas fielmente en sus tres museos principales, situados en un triángulo a no más de 500 metros el uno del otro. Al sur, el Siege Museum relata la infame victoria de 1689, cuando 30 000 habitantes de la ciudad mantuvieron a raya a las fuerzas invasoras del rey Jaime II, derrotándolas finalmente tras 105 días.

En el Tower Museum, la Exposición de las Derry Girls te permite ver escenas y accesorios de la exitosa serie. También podrás contemplar las reliquias del barco de la Armada Española que naufragó frente a las costas del vecino condado de Donegal en 1588. Cerca de allí, el Museum of Free Derry detalla la lucha por los derechos civiles que asoló la ciudad durante tantas décadas y que desembocó en la Batalla del Bogside y el Domingo Sangriento.

Tras almorzar en el encantador y tranquilo Soda & Starch tendrás el estómago lleno sin vaciar la cartera. O dirígete a Browns in Town, que ofrece platos fantásticos, cócteles originales y cervezas artesanas en un entorno moderno y confortable.

Nunca antes una serie de televisión había conquistado el corazón de una ciudad como Derry Girls. La serie norirlandesa más vista de todos los tiempos narra la vida de cinco adolescentes en la década de 1990, cuando la ciudad experimentaba grandes cambios, penurias y esperanzas de futuro. Hoy en día, los cinco protagonistas (Claire, Michelle, Erin, Orla y James) han sido inmortalizados en la fachada del pub Badger's, continuando la gran tradición de murales de Derry~Londonderry. Disfruta de un recorrido a pie de Derry Girls para ver los lugares de interés de la ciudad y acaba con el té de la tarde de Derry Girls en The Everglades Hotel. ¡Está repleto de rollitos de salchicha, conos de patatas fritas y otras delicias!

El recorrido histórico por Bogside es la mejor forma de ver los demás murales de la ciudad, incluyendo el monumento al Domingo Sangriento y el Free Derry Corner, mientras escuchas la historia del conflicto norirlandés y los disturbios que asolaron la ciudad durante generaciones.

Si (¡aún!) no eres un apasionado de Derry Girls, no te preocupes, porque hay mucho más que explorar esta tarde. El Guildhall ofrece vistas dignas de admirar, tanto dentro como fuera. Sus inmaculados ladrillos rojos, las vidrieras ornamentadas en tecnicolor y el techo de la torre de cobre de color aguamarina brillante convierten esta obra maestra neogótica en uno de los edificios más hermosos del noroeste. El Guildhall se construyó en 1887 y se ha restaurado varias veces tras sufrir un incendio dos décadas después. Aunque el exterior es una hazaña arquitectónica, descubrirás una maravilla al entrar en el edificio. En el extremo más alejado del vestíbulo, el órgano tubular se eleva hacia el techo como una gran águila desplegando las alas, formando un majestuoso telón de fondo que resulta perfecto para las numerosas bodas que se celebran en la actualidad.

Si dispones de más tiempo, la catedral de San Colombo, junto al imponente Bishop's Gate, guarda el candado y las llaves de las puertas originales de la ciudad.

El Puente de la Paz conecta Ebrington Square con el resto del centro de la ciudad y aspira a unir mucho más que barrios físicos. Construido para fomentar las relaciones entre las comunidades de Waterside y Cityside, que ocupan riberas y posiciones políticas opuestas, el puente se ha convertido rápidamente en un lugar muy querido por los lugareños y es un centro de actividad. Es el más reciente de los tres puentes que hay en Derry~Londonderry y el lugar perfecto para relajarse mientras el día llega a su fin. Un paseo relajado a pie o en bicicleta por este puente promete unas vistas espectaculares del río y garantiza el saludo de los amables habitantes de la «Ciudad Virgen». Aprovecha que estás en ese lado del Puente de la Paz y reserva una mesa en el restaurante Walled City Brewery, el único con fábrica de cerveza de Irlanda del Norte.

Uno de los secretos mejor guardados de la isla de Irlanda son los imponentes acantilados de Slieve League, en el condado de Donegal. Elevándose unos 600 metros sobre el océano Atlántico, estos acantilados marinos se encuentran entre los más altos de Europa. Antes de llegar a los acantilados, visita el Slieve League Cliffs Centre para descubrir la historia de la región, entrar en calor en la cafetería Tí Linn o curiosear en la tienda de artesanía. Desde el centro, puedes conducir hasta el principal mirador o dejar el coche en el aparcamiento que hay de camino y recorrer a pie el resto.

Si dispones de más tiempo, desvíate de los itinerarios habituales para contemplar la belleza natural de la cascada de Assaranca y pasear por la playa de Maghera para contemplar las vistas de la majestuosa y bella bahía.

De vuelta al aeropuerto, desvíate hasta el Mueso Glencolmcille Folk Village. Haz una visita guiada o simplemente da un paseo. Esta experiencia te llevará al Donegal de hace siglos. Explora una casita de pescador, una escuela y un pub-tienda tradicional, todo ello encaramado en la ladera de una colina con vistas a la cercana playa de Glenbay. Antes de emprender el tramo final de tu viaje, saborea las delicias recién horneadas de la casa de té y echa un vistazo a los talleres de artesanía, la música tradicional y los eventos culturales organizados en el pueblo.

Si dispones de más tiempo, visita Triona Design para ver su tweed tejido a mano. Incluso puedes ver a maestros tejedores fabricando tweed tejido a mano en telares tal como lo llevan haciendo durante siglos.