Killary Harbour

El fiordo glaciar de Killary actúa como frontera natural entre los dos bastiones de la Irlandatradicional: el condado de Mayo y el condado de Galway. El valle inundado suele albergar una gran variedad de vida marina, como nutrias, focas grises y comunes e incluso delfines y tiburones.

La vista de Killary desde la orilla es ciertamente espectacular, pero lanzarse al agua aquí te ofrece una perspectiva totalmente nueva. Sube a bordo de los Killary Fjord Boat Tours para hacer un recorrido turístico de 90 minutos por los impresionantes paisajes del norte de Connemara National Park.

De vuelta a tierra firme, está el pintoresco pueblo de Leenane. Se asienta en la desembocadura de Killary Harbour, y queda casi empequeñecido por las montañas de Connemara que le rodean. Leenane se hizo famoso en 1989 cuando protagonizó la adaptación cinematográfica de la obra teatral de John B Keane, The Field. El pub Gaynor fue el lugar donde tuvo lugar gran parte de la acción de la película, y en la vida real el personal sirve estupendas pintas y sabrosos sándwiches tostados, ¡además de dar conversación!

El valle de Delphi, que ofrece sublimes oportunidades fotográficas, se encuentra a siete minutos en coche del puerto y cuenta con tres espectaculares lagos: Glencullen, Doolough y Finnlough, que descienden hasta el río Bundorragha y desembocan en Killary Harbour. Por su parte, el valle de Maam, al este de Killary, está repleto de bosques centenarios, cuenta con multitud de yacimientos prehistóricos y está dominado por los montes Maumturk. Como dicen los lugareños, Killary es un lugar de contrastes: actividades al aire libre, momentos de Hollywood e historia antigua. ¡Es un lugar del que no querrás marcharte!

Un autóctono de la zona es el poni Connemara, la única raza equina autóctona de Irlanda. Se rumorea que estos dulces ponis llegaron a nuestras costas cuando la Armada Española se estrelló contra las costas de Connemara en el siglo XVI. Se dice que sus antepasados son los sementales árabes que nadaron hasta la costa desde los barcos naufragados y se instalaron en su nueva vida en Irlanda.

Hoy en día, los ponis son un magnífico medio de transporte y te llevan por las playas y ciénagas de Connemara. Cuando la marea está baja, vadean hasta las cercanas islas de Finish, Mweenish y Omey. Durante los meses de verano, la isla de Omey acoge su particular jornada de carreras por la playa. Cuando la marea esté baja, dirígete al clamor de las ovaciones que escucharás frente a la playa. Entre carrera y carrera, habrá música, baile y mucha comida. Solo tienes que seguir las señales de tráfico y a la entusiasta multitud... pero cuando anuncien que la marea vuelve a subir, asegúrate de seguir también a esa misma multitud de vuelta a tierra firme, o acabarás varado.

Antes de volver a la ruta Wild Atlantic Way, puedes conducir media hora hasta Westport, en el condado de Mayo. Es el lugar ideal para embarcarse en una aventura al aire libre que incluye desde montañas sagradas y casas señoriales hasta bahías repletas de islas. Las montañas Partry de los alrededores invitan a la escalada, y los cercanos ríos Erriff y Delphi son excelentes para la pesca con caña (pregunte en la zona por los permisos de pesca o visite el sitio web oficial del Gobierno para obtener más información).