Un viaje por el Anillo de Kerry

¿Buscas buena comida, festivales fantásticos y pubs con música tradicional y muchísima diversión? Killarney lo tiene todo. Esta animada localidad tiene una energía innegable que la convierte en un contrapunto interesante a los majestuosos paisajes circundantes. Killarney lleva desde mediados del siglo XVIII atrayendo a viajeros con su ambiente fantástico y amigable.

Date un festín de marisco fresco del Atlántico en Quinlan's Seafood Bar, siente los ritmos alegres de una sesión de música tradicional en Murphy's Bar y visita la increíblemente bella Muckross House, una mansión victoriana del siglo XIX que la reina Victoria visitó en su día y que se encuentra entre montañas y bosques.

Pero no agotes toda tu energía, ¡está a punto de empezar la ruta del Anillo de Kerry!

Con la cordillera montañosa de MacGillycuddy's Reeks y el pico más alto de Irlanda, Carrauntoohil, destacando en la izquierda, este primer tramo del Anillo de Kerry recorre serenos paisajes bucólicos y caminos estrechos bordeados por árboles y setos. Al llegar a Killorglin puede que observes la estatua de una cabra posando orgullosamente sobre una gran roca. Es el rey Puck.

Cada año, una cabra montesa es coronada rey y en el pueblo estalla un festival con varios días de música, danza y diversión sin igual. Se cree que el festival Puck Fair tiene sus orígenes en la época pagana y es uno de los más antiguos de Irlanda, con documentos oficiales que se remontan a principios del siglo XVII. Si tu visita no coincide con el festival, que se celebra a principios de agosto, no te preocupes: Killorglin es un divertido crisol de pubs, cafeterías y galerías de arte.

Si dispones de más tiempo, dirígete al Killorglin Golf Club, considerado uno de los campos más hermosos de la isla.

Al dejar Killorglin, el paisaje se vuelve cada vez más espectacular de camino a Glenbeigh, un pueblo apacible y particularmente bello gracias a la enorme playa de Rossbeigh y las colinas y montañas que lo rodean. Camina, monta a caballo, nada, haz surf, practica el senderismo o simplemente siéntate y contempla el juego de luces en el paisaje: es algo realmente especial.

Si dispones de más tiempo, desvíate un poco de la N72 para visitar el estrecho desfiladero de Dunloe, que serpentea por la cordillera de MacGillycuddy's Reeks. La ruta empieza en Kate Kearney’s Cottage y recorre lagos, puentes pequeños y paisajes de montaña excepcionalmente bellos. Ten en cuenta que se tardan entre cinco y seis horas en completarla a pie (ida y vuelta). También hay excursiones organizadas de un día desde Killarney.

Conocido como la puerta de acceso al Anillo de las Skellig, Cahersiveen es uno de los pueblos más occidentales de Europa. Se encuentra al pie de la montaña de Bentee y tiene una historia fascinante que se manifiesta a través de su fuerte de piedra del siglo VII y el precioso castillo de Ballycarbery, del siglo XV. Pero lo que le da un toque especial son sus antiguos Old Barracks de piedra.

Este centro patrimonial se construyó como comisaría para la Real Policía Irlandesa en la década de 1870, pero en la zona se rumorea que estos edificios con torretas y aspecto de castillo se construyeron por error. Según algunas fuentes, las autoridades británicas tenían tanta prisa por construir la comisaría que utilizaron por error los planos de un edificio de la India. ¿Realidad o ficción? No lo sabemos, pero en cualquier caso es una historia fantástica.

Cahersiveen es una puerta de acceso al Anillo de las Skellig, una extensión del Anillo de Kerry de 18 km de longitud. Cuenta con playas impresionantes, excepcionales vistas del Atlántico, la isla de Valentia y excursiones en barco a Skellig Michael, que sirvió como exteriores de Star Wars. Este Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO alberga un monasterio insular del siglo VI con cabañas de piedra seca.

De camino a Waterville, las carreteras se vuelven sinuosas al atravesar paisajes escarpados con la península de Skellig a un lado y atisbos del océano añadiendo un tono azul a los inmensos tramos verdes. Es una escapada perfecta en una parte de Irlanda legendaria por su belleza salvaje. Al entrar en el pueblo, es fácil percibir el atractivo de este agradable lugar costero, que fue uno de los destinos vacacionales favoritos de Charlie Chaplin.

Con el verde intenso de las montañas de fondo y mirando hacia el océano Atlántico, Waterville es un destino magnífico para practicar senderismo, golf y pesca. Por la noche, asegúrate de mirar hacia arriba. Esta parte de la isla es una Reserva Internacional de Cielo Oscuro. Paisajes espectaculares de día y cielos majestuosos de noche: ¡bienvenido a Waterville!

Bañada mansamente por el mar de color aguamarina y con ondulantes colinas verdes de fondo, la suave arena de la playa de Derrynane es perfecta para caminar, relajarse y reflexionar… con hermosas vistas del mar y pequeñas calas pintorescas.

Cerca de la playa se encuentra Derrynane House, que parece sacada de una novela del siglo XIX. Fue el hogar del líder político Daniel O'Connell, una de las figuras más importantes de la historia irlandesa. Visita la casa, saborea un café en los antiguos establos y explora el fabuloso bosque de los alrededores: es un lugar especial.

Sneem tiene su propio encanto. Las casas coloridas y cuidadas que bordean la plaza del pueblo le dan a este cautivador y pequeño lugar un aspecto de tarjeta postal. Un río apacible divide al pueblo entre la parte norte y la sur. Se trata de un lugar que casi queda eclipsado por el majestuoso paisaje que lo rodea. Aparca, da una vuelta y disfruta del ambiente especial de esta tranquila joya costera.

El fuerte de Staigue se encuentra al oeste de Sneem y se cree que esta construcción y sus alrededores sirvieron de emplazamiento defensivo y de lugar de culto. Es una de las fortificaciones circulares más grandes de Irlanda, sus muros de piedra alcanzan una altura de 5,5 metros y algunas secciones tienen un grosor de casi un metro. Los expertos creen que el fuerte es anterior a la llegada de San Patricio a Irlanda.

Si dispones de más tiempo, dirígete al aclamado resort Parknasilla, un refugio con hermosos paseos por bosques y rutas costeras que resulta perfecto para pasar unos días.

El paisaje cambia drásticamente al dejar atrás Sneem, con bellas zonas arboladas bordeando la carretera en su sinuoso paso hacia Kenmare. Haz una parada para probar un bol de crema de marisco en el bistró Boathouse de Dromquinna Manor mientras admiras las impresionantes vistas de la bahía de Kenmare. Al entrar en Kenmare encontrarás una sucesión interminable de tiendas de ropa de punto, excelentes restaurantes y animados establecimientos especializados en marisco.

En el primer pueblo patrimonial de Kerry, el encanto tradicional se mezcla con lo mejor de lo contemporáneo, con elegantes galerías de arte junto a pubs tradicionales, tiendas de antigüedades, librerías y tiendas delicatessen. Compra un jersey de Aran, deléitate con el mejor marisco de Kerry en Tom Crean Fish & Wine y empápate del ambiente de este divertido pueblo.

Prepárate para el próximo tramo de carretera, ya que atravesarás hermosos puertos de montaña camino del increíble desfiladero de Moll. Este «desfiladero» lleva el nombre de Moll Kissane, que abrió un «síbín» (bar clandestino) aquí en el siglo XIX, y es un extraordinario tramo de carretera sinuosa y de una belleza realzada por varios lagos y la presencia imponente de la cordillera de MacGillycuddy’s Reeks.

Visita la tienda Avoca Handweavers, situada en un peñasco rocoso. Es un lugar ideal para admirar vistas interminables de la montaña, el río y los lagos de la zona.