Lejos de los itinerarios habituales: de Dublín a Galway

Construida en la década de 1720, la mansión de Castletown es la primera y mayor finca palladiana de Irlanda, así como un ejemplo de ostentación a gran escala. La construyó William Conolly, el hombre más rico de Irlanda en esa época. Era propietario de unas 40.000 hectáreas de terreno y se decía que se necesitaban 240 caballos para transportar la renta que le reportaban sus tierras en medio año hasta Castletown.

Si dispones de más tiempo, puedes visitar una verdadera curiosidad: un granero que tiene forma de sacacorchos. El Wonderful Barn se erigió en el límite de la finca de Castletown en 1743 para crear empleo en la zona.

No cabe duda de que los Establos Nacionales de Irlanda, ubicados en Tully, son el centro neurálgico de la industria de las carreras de caballos en el país. Además de su rica historia equina, descubrirás la fascinante anécdota sobre su fundador, el coronel William Hall Walker. Registraba de manera meticulosa el momento en que nacía un potro y elaboraba personalmente su carta astral. Si no le gustaba lo que decían los astros, vendía de inmediato el potro, sin importar su linaje. No te vayas sin hacer una visita guiada. Tampoco puedes perderte los Jardines japoneses adyacentes, otro tributo a Walker, que estaba obsesionado con la horticultura asiática.
Si quieres ver lucirse a algunos de los mejores caballos de carreras de Irlanda, asiste a las carreras celebradas en estos emblemáticos hipódromos de Kildare: The Curragh, Punchestown y Naas.

Recorre las carreteras bordeadas de árboles que rodean el Parque de Patrimonio y Descubrimiento de Lullymore y creerás que estás en otro mundo. Lo que en su día fue un retiro monástico (hasta que fuera saqueado durante una rebelión a principios del siglo XVIII) es ahora un parque en homenaje a la turbera irlandesa. En el recorrido de la biodiversidad podrás conocer la asombrosa flora y fauna de la zona.
Si dispones de más tiempo, ¿te apetece ir de compras? Kildare Village es un centro comercial con tiendas de descuento en productos de marca, ¡así que prepárate para encontrar gangas increíbles! ¿Tienes hambre? Visita la localidad de Kildare y degusta la cocina galardonada de Harte's Bar and Grill en un ambiente relajado con platos deliciosos al estilo gastropub.

Descubre las curiosas “Siete maravillas de Fore” en las ruinas de esta abadía benedictina ubicada en una tranquila pradera del condado de Westmeath. Fundada por San Fechin en el año 630, la abadía de Fore alberga historias de milagros, desastres y misticismo.
Si dispones de más tiempo, disfruta de un hermoso paseo por el pintoresco entorno del castillo y los jardines de Tullynally, antigua residencia de los condes de Longford.

En el corazón del condado de Westmeath, el apacible exterior de la mansión y los jardines de Belvedere oculta una historia de esposos perversos, gestos grandiosos y una batalla entre hermanos. El conde de Belvedere fue el responsable de un gran sinsentido, ya que construyó el denominado “Muro de los celos” para tapar la casa de su hermano, que era mucho más grande que la suya. ¡Para que luego hablen de rivalidad entre hermanos!
Si dispones de más tiempo, visita la catedral de Cristo Rey, en la cercana Mullingar. Construida en forma de basílica, sus agujas gemelas pueden verse a kilómetros de distancia. Alberga impresionantes frescos y un museo de artefactos históricos que datan del siglo XVII.

Camina con cuidado, ya que estás en una tierra de leyenda donde una antigua deidad encontró su lugar de sepultura... Al ser la residencia de los grandes reyes y el centro geográfico de Irlanda, las visitas guiadas de la colina de Uisneach son literalmente un paseo por la historia. Aquí convergen las cuatro provincias de Irlanda y, en su día, fue el lugar de residencia de la realeza irlandesa. En mayo, el Festival del fuego aviva la celebración del verano y rinde homenaje a la diosa pagana Ériu, de quien se dice que está enterrada bajo una gran piedra conocida como la Roca del gato.
Si dispones de más tiempo, descubre motores a vapor gigantescos, un molino de agua de madera y dos siglos de artesanía del whiskey. Una visita a la Kilbeggan Distillery Experience combina las habilidades tradicionales con los ricos sabores del presente. ¿Te apetece un trago?

Descubre uno de los secretos mejor guardados del condado de Offaly en una visita al castillo de Charleville, a las afueras de la localidad de Tullamore. En las entrañas de un bosque de robles ancestrales, esta fortaleza del siglo XVIII tiene todo lo que cabe esperar de un castillo gótico, ¡incluso un montón de espíritus encantados! Es posible realizar visitas guiadas con los actuales inquilinos mediante reserva previa. No olvides pasar por el antiguo roble conocido como King Oak, que ha dominado la propiedad durante más de 400 años.
Si dispones de más tiempo, el tres es el número mágico del Centro de Visitantes de Tullamore D.E.W., que fabrica whiskey con tripe destilación, triple mezcla y triple maduración. Situada en un almacén del siglo XIX, la destilería de Tullamore D.E.W. debe su nombre al creador del whiskey, Daniel E. Williams.

Inmensos jardines formales, antiguos senderos boscosos y un castillo grandioso, en el castillo de Birr hay una estrecha relación entre ciencia y naturaleza. Después de todo, aquí se encuentra “el Leviatán”, que en su época fue el mayor telescopio del mundo. A principios de la década de 1840, el tercer conde de Rosse diseñó este artefacto gigante que atrajo a visitantes de todo el mundo para ser testigos de tal maravilla. Aún funciona y se encuentra en mitad de esta increíble finca, junto con un Centro de la Ciencia y jardines galardonados.
Si dispones de más tiempo, descubre un período más oscuro de la historia en el Centro Irlandés de los Asilos de Pobres de Portumna, en el condado de Galway. En 1852 acogía a 600 internos y formaba parte de una red de asilos de pobres que se describió como “la más temida y odiada institución jamás fundada en Irlanda”.

Explora la historia medieval del castillo de Athlone, ubicado en los márgenes del río Shannon. Originalmente construido para el rey Juan de Inglaterra en 1210, hoy en día el castillo incluye una recreación cinematográfica en 360º del sangriento sitio de Athlone que tuvo lugar en 1691, un asalto feroz a la ciudad que duró 10 días.
Si dispones de más tiempo, Wineport Lodge es el lugar perfecto para disfrutar de una abundante comida rústica en un entorno acogedor a orillas de Lough Ree.

En el monasterio de Clonmacnoise abundan las historias sobre santos, las ruinas místicas y los secretos sagrados. Fundado por San Ciarano en el siglo VI, el asentamiento cuenta con altas cruces, siete iglesias, dos torres circulares y una catedral, todo con vistas al resplandeciente río Shannon. Recorre la zona o haz una excursión en barco y contempla todo desde una perspectiva diferente con Viking Tours.
Si dispones de más tiempo, disfruta de un emocionante viaje al pasado por la Irlanda indómita en el parque Lough Boora. Cuenta con rutas de senderismo, como la intrigante ruta de las hadas (en Fairy Avenue viven 14 hadas) y yacimientos mesolíticos a orillas de un lago descubiertos por un vecino en 1977.

En el condado de Galway, al borde de Lough Rea, un lago conocido por su playa con Bandera Azul y su magnífica pesca, se encuentra la catedral de Loughrea, que data de 1897 y merece ser visitada. El interior de la catedral de Loughrea refleja el Movimiento de Artes y Oficios irlandés de finales del siglo XIX y presenta una moderna decoración interior y sorprendentes vidrieras irlandesas. Haz una visita con audioguía de 30 minutos por la catedral para apreciar esta bella estructura en toda su plenitud.
Si dispones de más tiempo, no te pierdas la antigua ciudad amurallada de Athenry, donde puedes disfrutar de una visita guiada al castillo de Athenry, que data del siglo XIII. Pero no todo es historia en Athenry. Si alguna vez has escuchado cantar a los seguidores irlandeses en los eventos deportivos celebrados por todo el mundo, quizá conozcas la canción inspirada por los campos de Athenry.