Modo retiro

Irlanda tiene una larga historia como lugar de retiro. Ya en los siglos VI y VII, los ermitaños monásticos buscaban valles y lagos tranquilos para reflexionar en silencio. Y a día de hoy quienes buscan un lugar de relajación siguen encontrándolo en los parajes naturales de Irlanda.

¿Por qué? Dave Brocklebank, propietario del centro de yoga y meditación del Burren explica: «hay algo natural y que te ayuda a conectar en Irlanda».

La Good Retreat Guide los define como «una respuesta moderna a la vida moderna». A nosotros nos gusta considerarlos oasis de paz y tranquilidad, perfectos para recargar pilas y descansar.

Actualmente se ofrecen retiros en una amplia variedad de formatos, pero todos prometen que sentirás una gran relajación antes de poder decir «velas aromáticas».

Gracias a su rico patrimonio cristiano, Irlanda cuenta con muchas opciones de retiros espirituales, pero si deseas purificar tu cuerpo más que tu alma, tu destino es un balneario o spa. Solo tienes que cerrar los ojos, respirar profundamente y relajarte.

En West Cork, el centro budista tibetano Dzogchen Beara da la bienvenida a visitantes de todas las religiones. Situado en un extremo increíblemente hermoso de la península, su jardín de meditación es famoso por sus vistas impresionantes, mientras que los cursos de meditación también te irán de maravilla.

«A menudo se puede “sentir” la ligera hiperactividad de quienes llevan vidas trepidantes en la ciudad cuando llegan», comenta Dave del centro de yoga y meditación del Burren. «Sin embargo, al final del primer día de meditación, yoga, y un paseo guiado tras un suculento desayuno, todo el mundo está feliz, y parece que el mundo exterior y sus preocupaciones desaparecen».

Dave sabe que la ubicación es fundamental para la experiencia. Por eso se estableció en el oeste de Irlanda: «El ritmo de la vida es muy pausado, es casi como retroceder 40 años en el tiempo». Su centro aprovecha el «paisaje espectacular» del Burren para, literalmente, poder respirar aire fresco durante la práctica del yoga, porque algunas clases se imparten sobre un acantilado con vistas al mar.

Gabriele Tottenham del Blaney Spa llegó a Fermanagh desde su Alemania natal hace 30 años y le gustó tanto el lugar que se quedó. La cabaña de madera que alberga su spa en la costa de Lough Erne ofrece una relajante mezcla de clases de yoga, una bañera de hidromasaje, sauna y terapias de masaje.

La relajación está garantizada en Macalla Farm, en la hermosa bahía de Clew. Se organizan varios retiros que combinan yoga con cocina vegetariana, meditación y paseos a caballo.

En el idílico valle del lago Glendalough de San Kevin, el Glendalough Hermitage da la bienvenida a visitantes de todas las religiones que buscan una renovación espiritual a través del retiro y la peregrinación. El centro de retiro de Drumalis, dirigido por las Hermanas de la Cruz y la Pasión, también ofrece un programa de retiros y talleres.

Cloona Health Retreat es famoso por su programa de desintoxicación, y el Irish Times lo recomendó para «ayudar a iniciar un nuevo régimen de salud y bienestar... y desintoxicarse de la vida moderna».

El Sunday Times eligió Ard Nahoo como uno de sus cinco mejores refugios. Este retiro ecológico en el norte de los glens de Leitrim combina un entorno precioso con terapias y yoga.

Por supuesto, algunas personas solo necesitan estar consigo mismas para su retiro. Si perteneces a ese grupo, puedes alquilar el lujoso entorno de Moongate Lodge, en Carlow.

El periódico irlandés Sunday Independent afirmó: «Moongate es un lugar ideal para buscar tu propio renacimiento espiritual».

«Renacimiento espiritual»… No puedes negar que suena muy bien.