Seis artesanos maravillosos de la Ruta Costera del Atlántico
Condado de Donegal
McNutt of Donegal
1. McNutt of Donegal
Puede que Donegal sea más famoso por su tweed, pero la tradición de tejer está muy presente en la hermosa alpaca, la lana de cordero, la lana pura y los productos de lino de McNutt of Donegal. Esta elegante marca se creó en una pequeña fábrica en la década de 1950 y se inspira en su ubicación en el diminuto pueblo de Downings, junto a la Ruta Costera del Atlántico.
¡Y menuda ubicación! Posee la indómita belleza costera en su máximo esplendor, tiene vistas al poderoso océano Atlántico y se encuentra a los pies de la montaña de Muckish, con su característica cima plana. Entra en la tienda para echar un vistazo o reservar un recorrido por el molino (se requiere cita para grupos de 10 o más personas).
Condado de Sligo
The Atlantic Equipment Project
2. The Atlantic Equipment Project
La Ruta Costera del Atlántico es el destino perfecto si deseas explorar: un paisaje que te anima a escalar montañas, atravesar zonas pantanosas, pasear por playas desiertas y surfear olas épicas. Creada e inspirada en este lugar y en su gente, la gama de bolsas de Atlantic Equipment Project está elaborada a mano en el impresionante entorno de Strandhill, en el condado de Sligo. Su gama de bolsas, mochilas y bolsos pequeños ofrece diseños sencillos, a la par que bellos, pensados para vivir aventuras y elaborados con materiales naturales y sostenibles que reflejan el legado de la ubicación costera en la que se han creado…
Condado de Galway
Joe Hogan Baskets
3. Joe Hogan Baskets
Oculto en Loch na Fooey, en una zona silvestre y hermosa del condado de Galway, el diminuto pueblo de Finny sirve de inspiración para las tradicionales cestas tejidas de Joe Hogan. Joe lleva confeccionando cestas en Loch na Fooey desde 1978 y se ha granjeado una excelente reputación gracias a sus cestas fuertes, duraderas y con unos colores que reflejan los de los sauces naturales que crecen en la zona ribereña. Si te impresionan las imágenes, puedes probar a elaborar tu cesta en uno de los cursos que imparte durante todo el año.
Islas Aran, condado de Galway
Inis Meain Knitwear
4. Inis Meain Knitwear
Si dependiera solo de la ubicación, Inis Meain se llevaría el primer premio. Esta increíble isla Aran, la mediana de las tres islas del océano Atlántico, te dejará boquiabierto con vastas franjas de piedra caliza agrietada, olas rompientes y delicadas flores silvestres. Inis Meain Knitwear mantiene viva la costumbre de la isla y se inspira en las tradiciones de los lugareños que crearon el ahora famoso jersey tipo Aran, con un tejido basto fabricado originalmente con lana de oveja. Combinando la inspiración obtenida del paisaje escarpado y aislado con un toque de lujo moderno, el propietario Tarlach de Blácam comenta: “Estamos profundizando en el legado de las islas Aran y creando algo diferente.”
El Burren, condado de Clare
Burren Perfumery
5. Burren Perfumery
El 70 % de las especies de flores silvestres de Irlanda se pueden encontrar en la peculiar región del Burren, en el condado costero de Clare, por lo que parece lógico que también sea la sede de Burren Perfumery. Aquí, en medio de uno de los paisajes kársticos calizos más extraordinarios de Europa, esta pequeña perfumería familiar utiliza la belleza del entorno como inspiración para su gama de perfumes, jabones, lociones, velas y bálsamos elaborados a mano. Con su bonito huerto de hierbas aromáticas, sala de mezclas y salón de té, se trata de una auténtica joya en pleno corazón del condado de Clare.
Dingle, condado de Kerry
Louis Mulcahy Pottery
6. Louis Mulcahy Pottery
La península de Dingle, un lugar de majestuosidad natural, historia antigua y ricas tradiciones culturales, es el hogar de uno de los alfareros más famosos de Irlanda, Louis Mulcahy. Descrito por el Craft Council of Ireland como “el padrino de la artesanía irlandesa”, Mulcahy sabe de dónde procede su inspiración: “Los colores del mar y las montañas que me rodean se reflejan en mis piezas. Asimismo, las enormes olas invernales que chocan con fuerza contra nuestros acantilados han despertado mi deseo de crear grandes obras escultóricas”.
Los visitantes pueden ver cómo trabajan los torneadores profesionales y aprender técnicas como el moldeado y el barnizado. También hay una sala abierta para quienes deseen ensuciarse las manos creando sus propias obras maestras deformes en la rueda del alfarero.