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Carrickfergus y Whitehead

Repleto de historia y cultura, Carrickfergus, a orillas del Belfast Lough, es uno de los pueblos más bonitos de Irlanda del Norte. Ahonda en el pasado en el Museo de Carrickfergus o visita el imponente castillo de Carrickfergus, de 800 años de antigüedad, una de las estructuras medievales mejor conservadas de la isla de Irlanda. Después de visitar Carrickfergus, sigue la espectacular carretera de la costa hasta la preciosa población costera de Whitehead, con sus hileras de casas de colores, los maravillosos cafés y las vistas increíbles. Visita el Museo del Ferrocarril de Whitehead para descubrir el fascinante pasado ferroviario de la ciudad, disfruta de manjares deliciosos y la artesanía local en The Bank House Café y recorre la asombrosa ruta costera hasta el faro de Blackhead, que se alza de un modo espectacular en lo alto del escarpado acantilado de Blackhead.

Glenarm

Con uno de los jardines amurallados más antiguos de Irlanda y un espectacular castillo del siglo XVI, Glenarm es un bonito pueblo georgiano que evoca romanticismo e intriga a partes iguales. La elegante arquitectura del siglo XVIII, el encanto de los adoquines y el glorioso Layde Walk, que ofrece vistas impresionantes del pueblo y la bahía, convierten a este lugar en una auténtica joya del condado de Antrim. A los fans de ®Juego de Tronos les encantará The Steensons Economusée, un negocio familiar de orfebres creadores de joyas únicas que pueden verse en la serie de éxito. Y no te pierdas el bonito pueblo de Carnlough, que también está en la costa. Un recorrido en barco por la bahía de Carnlough desde el pequeño puerto ofrece unas vistas magníficas de la costa.

Cushendun y Cushendall

Con unos nombres tan similares es fácil confundir Cushendun y Cushendall, pero cada uno cuenta con un carácter y atractivo distintivos. Conocido por su fantástica escena musical, sus estupendos pubs y su maravillosa ubicación a los pies del increíblemente hermoso valle de Glenballyeamon, el encanto de Cushendall se ve incrementado por la inusual Curfew Tower de arenisca roja y el pequeño arroyo que recorre el pueblo. Compuesto por una hilera de casas de campo inconfundibles y exquisitas, el pueblo de Cushendun, declarado patrimonio histórico-artístico, es un paraíso costero digno de postal repleto de carácter y folclore. Canta y charla con los lugareños en uno de los pubs más pequeños de Irlanda, Mary McBride’s, que cuenta con más de 50 variedades de whiskey irlandés, o adéntrate en las cercanas cuevas de Cushendun, una localización de rodaje de Juego de Tronos®.

Ballycastle

Repleto de casas coloridas, extensas vistas marinas y una maravillosa playa, Ballycastle es una mezcla cautivadora de jolgorio y relajación, con estupendos pubs, restaurantes y cafeterías. Empieza tu día con el recorrido gastronómico de Ballycastle y prueba algunas delicias locales en el carismático entorno de Mary's Cottage Kitchen. A continuación, recorre la senda del hombre gris hasta los acantilados de basalto perpendiculares de Fair Head. Aquí, entre cabras montesas y aves, contemplarás vistas impresionantes de los acantilados de piedra calcárea blanca de la isla de Rathlin. ¿Te gusta lo que ves? ¿Por qué no te subes al ferry que va hasta la isla para disfrutar de un día de fantástico aislamiento, asombrosas rutas a pie y auténtico encanto isleño?

Portrush

En la animada población costera de Portrush, descubre la dramática historia y las icónicas ruinas del castillo de Dunluce, así como el pueblo homónimo, abandonado ya hace mucho tiempo, o explora la rica tradición de destilado que existe en la región en la destilería en activo más antigua de Irlanda, en el cercano pueblo de Bushmills. En cuanto al surf, no importa cómo lo hagas siempre y cuando sonrías. Si te sientes lleno de energía, coge olas con una clase de Alive Surf School y después pásate por el tradicional, y peculiar, Harbour Bar para disfrutar de una deliciosa carne cocinada a la leña y de música en directo.

Portstewart

La población costera de Portstewart representa a la perfección el encanto natural de esta costa. Con su largo tramo de impresionante playa con bandera azul y las espectaculares olas que emergen del océano Atlántico, no es de extrañar que este lugar haya inspirado el éxito de Bing Crosby “Red Sails in the Sunset”. Recorre el Port Path, un bello tramo costero levemente ondulante y pintoresco con vistas marinas panorámicas de Donegal, o disfruta de una cultura gastronómica muy práctica en Harry’s Shack, que también te ofrece vistas del mar y marisco fresco en una choza sobre la arena dorada de la playa. Una auténtica gozada.

¿Por qué no aprovechas la oportunidad de explorar el primer asentamiento humano conocido de la isla de Irlanda, en Mountsandel Fort, junto al próximo río Bann, en Coleraine, o el espectacular templo de Mussenden, situado en lo alto del acantilado de Castlerock? Sigue tu viaje y serás recompensado con la rica historia de la aldea de Eglinton, fundada como parte de una plantación en 1619 por la Grocers' Company of London.